Mensaje del Gerente General
Tengo la enorme satisfacción de presentar el primer reporte de sustentabilidad elaborado por Madexa SRL. Este reporte es para nosotros un paso muy importante en el camino de consolidación de nuestra estrategia de sustentabilidad y constituye el primer hecho concreto de rendición de cuentas de nuestra gestión a nuestros grupos de interés.
En su elaboración ha participado activamente la dirección, el personal y los socios de la empresa. A todos ellos tengo que agradecer por el esfuerzo realizado para llevar adelante el relevamiento de todos los datos necesarios para elaborar este informe.
Junto con la realización de este reporte, nos propusimos el año pasado empezar a trabajar para alinearnos a los requerimientos de la Norma Internacional ISO 26.000 de Responsabilidad Social, lo que nos permitió identificar los aspectos de nuestra gestión que ya se están desarrollando, y a la vez que poder establecer las áreas de mejora.
Al terminar este informe nos damos cuenta de todo lo que falta hacer, como es natural en una empresa tan autocrítica como la nuestra y que recién comienza a incorporar profesionalmente la gestión de la responsabilidad social a sus procesos. Pero por otro lado, nos hemos sorprendido porque lo que se ha hecho en materia de sustentabilidad es mucho más de lo que suponíamos.
En lo personal, empezar a trabajar con el concepto de sustentabilidad cambió mi forma de mirar la empresa y su futuro. Este concepto permite tener una visión mucho más amplia de los negocios, que va más allá de la simple generación de ganancias. Bajo esta mirada, las decisiones que se toman en el día a día deben tener en cuenta siempre a nuestra gente, el medioambiente, nuestra cadena de valor, y todos nuestros grupos de interés, para asegurar así la continuidad de nuestra empresa a largo plazo promoviendo la sustentabilidad.
Esta mirada nos permite analizar los factores que ponen en riesgo la sustentabilidad y tomar las acciones que correspondan para minimizarlos. Planificar acciones que minimicen nuestro impacto en el medio ambiente. Pensar la empresa como parte de la comunidad donde nos desenvolvemos y apostar a que ambas se desarrollen a la par. Ver a nuestro capital más valioso, que es nuestra gente, como socios que con su empuje y motivación garantizan el crecimiento de la empresa. Apostar a su desarrollo tanto en lo material, como en lo personal atendiendo a su capacitación, equilibrio en su vida laboral y familiar, etc. Evaluar la rentabilidad de la empresa desde el punto de vista de la sustentabilidad, y en ese camino apostar a desarrollar con nuestra gente una gestión de negocios de excelencia, que asegure obtener los resultados necesarios para poder hacer las inversiones que garanticen nuestro liderazgo futuro.
En este marco, es importantísimo el liderazgo de quienes ejercemos la conducción, ya que somos quienes a través de nuestra gestión y ejemplo guiamos a la empresa con convicción y energía por el camino de la sustentabilidad. Seguramente en el camino nos vamos a equivocar o vamos a encontrar obstáculos; pero teniendo claro a dónde queremos ir, corregiremos los errores e intentaremos nuevamente.
Podemos imaginar un mundo mejor y más sustentable, donde cada uno haga el mejor esfuerzo para hacer bien las cosas que le tocan hacer en lugar de echar culpas a los demás. Que nadie nos quite el derecho a soñar con un mundo mejor para nuestros hijos.
En su elaboración ha participado activamente la dirección, el personal y los socios de la empresa. A todos ellos tengo que agradecer por el esfuerzo realizado para llevar adelante el relevamiento de todos los datos necesarios para elaborar este informe.
Junto con la realización de este reporte, nos propusimos el año pasado empezar a trabajar para alinearnos a los requerimientos de la Norma Internacional ISO 26.000 de Responsabilidad Social, lo que nos permitió identificar los aspectos de nuestra gestión que ya se están desarrollando, y a la vez que poder establecer las áreas de mejora.
Al terminar este informe nos damos cuenta de todo lo que falta hacer, como es natural en una empresa tan autocrítica como la nuestra y que recién comienza a incorporar profesionalmente la gestión de la responsabilidad social a sus procesos. Pero por otro lado, nos hemos sorprendido porque lo que se ha hecho en materia de sustentabilidad es mucho más de lo que suponíamos.
En lo personal, empezar a trabajar con el concepto de sustentabilidad cambió mi forma de mirar la empresa y su futuro. Este concepto permite tener una visión mucho más amplia de los negocios, que va más allá de la simple generación de ganancias. Bajo esta mirada, las decisiones que se toman en el día a día deben tener en cuenta siempre a nuestra gente, el medioambiente, nuestra cadena de valor, y todos nuestros grupos de interés, para asegurar así la continuidad de nuestra empresa a largo plazo promoviendo la sustentabilidad.
Esta mirada nos permite analizar los factores que ponen en riesgo la sustentabilidad y tomar las acciones que correspondan para minimizarlos. Planificar acciones que minimicen nuestro impacto en el medio ambiente. Pensar la empresa como parte de la comunidad donde nos desenvolvemos y apostar a que ambas se desarrollen a la par. Ver a nuestro capital más valioso, que es nuestra gente, como socios que con su empuje y motivación garantizan el crecimiento de la empresa. Apostar a su desarrollo tanto en lo material, como en lo personal atendiendo a su capacitación, equilibrio en su vida laboral y familiar, etc. Evaluar la rentabilidad de la empresa desde el punto de vista de la sustentabilidad, y en ese camino apostar a desarrollar con nuestra gente una gestión de negocios de excelencia, que asegure obtener los resultados necesarios para poder hacer las inversiones que garanticen nuestro liderazgo futuro.
En este marco, es importantísimo el liderazgo de quienes ejercemos la conducción, ya que somos quienes a través de nuestra gestión y ejemplo guiamos a la empresa con convicción y energía por el camino de la sustentabilidad. Seguramente en el camino nos vamos a equivocar o vamos a encontrar obstáculos; pero teniendo claro a dónde queremos ir, corregiremos los errores e intentaremos nuevamente.
Podemos imaginar un mundo mejor y más sustentable, donde cada uno haga el mejor esfuerzo para hacer bien las cosas que le tocan hacer en lugar de echar culpas a los demás. Que nadie nos quite el derecho a soñar con un mundo mejor para nuestros hijos.